Hemos hablado en anteriores blogs sobre esta gala, y hoy os voy a contar cómo se popularizó este evento hasta convertirse en la mítica Gala Met que conocemos hoy en día. La Gala Met es como la Super Bowl de la moda: reúne a los mejores diseñadores del mundo para rendir homenaje a la moda y celebrar la creatividad sin límites. Es el escenario donde los diseñadores pueden presumir de su destreza en la alta costura, y la madrina de todo esto es Anna Wintour. A la gente le gusta ver lo mejor de la moda: teatro, fantasía y un universo de creatividad. La gala se ha convertido en un fenómeno global, pero no siempre fue así. Esta es la historia de cómo Vogue y Anna Wintour transformaron la Gala Met en el evento de moda más importante del mundo.

“Cuando pienso en la Gala Met, se me viene a la cabeza todo el talento, la creatividad y el diseño. Y eso es lo que tiene que ser la Gala Met”, afirmó Anna Wintour en su documental. Anna trabaja con dos figuras clave que ya mencionamos en el post anterior: el director y la estilista de Romeo y Julieta.

Hoy en día, la Gala Met es el evento de moda más visto del mundo, pero lograr ese estatus llevó más de 25 años. Su primera edición fue en 1948, en una versión muy pequeña y elitista. “Era una fiestecita privada para la alta sociedad del Upper East Side neoyorquino. Y fue así durante bastante tiempo”, recordó Michael Kors en una entrevista para Vogue.

El gran cambio llegó en 1995, cuando Anna Wintour tomó las riendas del evento e invitó a todo el universo de la moda: Oscar de la Renta, Tommy Hilfiger, Calvin Klein, Kate Moss, Isaac Mizrahi y Gianni Versace. En aquella época no existía la alfombra roja tal como la conocemos hoy. Era simplemente una combinación de figuras de la moda, la alta sociedad y mecenas del museo. “Fui a mi primera Met Gala en 1995 con un vestido de segunda mano. Desde entonces, intento enmendar mi error”, recordó Sarah Jessica Parker.

Anna quería abrir la moda al público general. La industria estaba viviendo un cambio: cine, música, moda y arte comenzaban a superponerse, pero hasta mediados de los noventa la moda apenas se reflejaba en el cine.

El documental Unzipped fue un punto de inflexión. Mostró por primera vez el proceso creativo de un diseñador, desde la creación de una colección hasta el desfile. “No sabíamos lo que hacíamos cuando lo rodábamos, pero éramos conscientes de que a la gente le iba a gustar”, confesó Isaac Mizrahi. El éxito de este documental radicó en presentar la moda como entretenimiento, acercándola al público de una manera inédita hasta ese momento.

Anna Wintour entendió que la moda debía dejar de ser una torre de marfil exclusiva y abrirse al mundo. “Es como hablar con uno mismo. Hay que hacer que esta noche sea más inclusiva y participativa, no solo moda”, reflexionó Michael Kors. Wintour sabía identificar lo que iba a triunfar, a qué personajes se iba a hablar y qué iba a generar interés.

En 1996, la gala rindió homenaje a los 50 años de la firma Dior, y todas las miradas se centraron en la princesa Diana, invitada de honor. Como mencionamos en el post anterior, asistió vestida de Dior. Su presencia fue un bombazo mediático. Acompañada de su amiga y editora de Harper’s Bazaar, Liz Tilberis, Diana iluminó la gala con su carisma. “En ese momento supe que la Gala Met iba a cambiar, pero no imaginaba cuánto”, comentó Anna.

 

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